¿Qué es pitch?

Un pitch (o pitch deck) es un método que se utiliza principalmente para las reuniones que se celebran con los inversionistas interesados para vender un proyecto. La presentación describe la idea principal sobre el producto o la prestación de servicios de la empresa.

Dado a que la arquitectura de la presentación es parecida en la gran totalidad de los pitches, el inversor tiene la posibilidad de seguir la presentación ordenadamente, lo que favorece la percepción del proyecto o de la empresa.

¿Cómo hacer un pitch?

Los pasos a seguir en la elaboración de una propuesta varían según el autor, sin embargo, casi todos los autores comparten la siguiente estructura:

Concepto: para empezar, es preciso aclarar en qué consiste el servicio o el producto que se intenta vender. Resulta oportuno plasmarlo como una frase breve, puesto que después habrá oportunidad de desarrollarlo.

Problema: en qué consiste este inconveniente, molestia o necesidad que soluciona dicho producto o servicio. Para explicarlo es mejor contarlo con una historia (storytelling) o describiendo datos específicos de la problemática a resolver.

Solución: en este punto se deberá presentar el producto o servicio, señalando sus bondades y la forma en que resuelve el inconveniente que se acaba de detallar.

Modelo de negocio: habiéndose expuesto la problemática y la solución que ofrece el producto o servicio, convendrá exponer de qué manera se obtendrá rentabilidad a través del proyecto.

Mercado: en esta fase hay que definir la magnitud del mercado, esto es, el número de individuos que tienen el problema que ha sido planteado, además del perfil del consumidor que adquiriría dicho producto o servicio.

Marketing: llegados ya a este paso, se expondrán también las estrategias para atraer a los clientes mediante campañas publicitarias.

Equipo: resulta clave destacar el perfil que tienen los integrantes fundamentales del equipo, subrayando su trayectoria previa y su rol dentro del proyecto en cuestión. Hay que transmitir tranquilidad a los inversionistas posibles, acerca de las personas del equipo que trabajan para lograr los objetivos.

Competencia: cuáles son aquellas empresas con las que compite nuestro producto o servicio, qué debilidades y fortalezas tiene, etc. A menudo suele afirmarse que cuando no existe la competencia, el mercado no existe.

Aspectos financieros: hay que marcar una perspectiva de planeamiento de por lo menos tres años, calculando los ingresos y los gastos que tendrá ese proyecto. Conviene hacer una simulación sobre cómo repercutiría en el proyecto el hecho de contar con el dinero de los potenciales inversores.